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Si la cara es el espejo del alma, las manos son, en muchos casos, una muy buena carta de presentación y una herramienta para manejarnos en nuestro día a día. Por eso es fundamental cuidarlas hidratando la piel y utilizando tratamientos para las uñas, que a veces son las grandes olvidadas. Y es que, igual que ocurre con el maquillaje, para lucir una buena manicura o uñas de gel es clave que estén sanas y fuertes. Solo así durarán más y se mantendrán perfectas hasta el último día sin que tus uñas se vean afectadas.
Las uñas reflejan muchos de nuestros problemas de salud: estrés, deshidratación, falta de calcio... por eso el primer paso para que estén sanas y bonitas es llevar una buena alimentación. A partir de ahí, tratar las uñas es hidratarlas y fortalecerlas para que crezcan bien y no se rompan con facilidad; y como ocurre con la piel del rostro, prepararlas y protegerlas antes de aplicar sobre ellas esmaltes y otros productos. Utilizar un endurecedor de uñas es una buena idea si las tienes frágiles y además funciona perfectamente solo, tanto si te las pintas después como si no. Utilizar aceites para hidratar tanto la uña como la cutícula también puede ser una buena incorporación a tu rutina de belleza.
Además de un buen fortalecedor de uñas, para que el resultado de la manicura sea el deseado hay algunos productos que pueden ser grandes aliados, sobre todo dos: una base de uñas como Dr Rescue All In One, imprescindible antes de aplicar esmaltes ya que actúa como perfeccionador alisando la superficie, fijando mejor el producto y evitando que la uña se manche, entre otras cosas. Y el 'top coat', como Dr Rescue Top Coat, el último paso de la manicura, la capa final para sellar bien el color o nail art y darle un extra de brillo. Estos dos productos pueden utilizarse con uñas cortas o largas y también solos para proteger las uñas de agresiones externas o para embellecer su color natural con un toque de brillo.
El mundo de las manicuras ha evolucionado muchísimo. Lejos quedan los años en los que el rojo y el rosa clarito eran las únicas opciones de color y la manicura francesa el diseño más elaborado. Hoy, la infinita gama de tonos disponibles y la creatividad del nail art unidas a los diferentes tipos de uñas postizas, han abierto un abanico de posibilidades otrora impensables. Por ejemplo, los esmaltes efecto gel (o los top coat que consiguen el mismo resultado, como Dr Rescue Top Coat de nuevo), que tienen lo mejor de las manicuras profesionales y las uñas de gel pero con la ventaja de poder hacerlo en tu propia casa. Conseguir un color perfecto y de larga duración es muy fácil con estos esmaltes y, además, también ayudan al cuidado de las uñas actuando como tratamiento porque contienen ingredientes como hierro, calcio o vitaminas que refuerzan las uñas frente a las agresiones externas.
La función de los fortalecedores de uñas es tratar las uñas débiles, delgadas o quebradizas para que ganen grosor y fuerza. Lo más conveniente es utilizarlo como tratamiento, es decir, con asiduidad, no de vez en cuando. Inclúyelos en tu rutina de belleza habitual y, si no utilizas esmaltes, aplícalos cada uno o dos días. Si sueles llevar color, utilízalo cada vez que te las pintes. La constancia es la mejor manera de obtener resultados. Tus uñas te lo agradecerán.